Una vez leí por ahí (o escuché, quien sabe) que la gente que es compradora compulsiva o muy materialista, es porque siente una necesidad extrema de rellenar esos vacíos que tienen con nuevas compras.
En cierto punto esto es totalmente real, y sin llevarlo a un extremo (como en el caso de un comprador compulsivo), todos lo hacemos, por eso es que (sobre todo las mujeres) acostumbran a irse de shopping para aliviar la tristeza. Es algo así como aliviar la tristeza con la comida, pero con cosas, generalmente ropa.
También me viene a la cabeza la frase que dijo Blair una vez "El que dijo qué el dinero no compraba la felicidad, no sabía donde comprar". Entonces asociamos de nuevo la idea de lo material = felicidad. Pero me parece que hay que meterse en qué tipo de felicidad es. No es lo mismo la felicidad que uno siente cuando ve muchas bolsas de ropa nueva arriba de su cama que la felicidad de ganarte un premio muy deseado.
Entonces, acá va mi punto, creo que para cada uno existe la felicidad de "estar contento" y la felicidad que realmente es genuina, esa felicidad que no nos llena por un rato, sino que realmente nos llena por completo y nos entrega a un estado en el que nos queremos mantener por siempre.
Yo siento que mi felicidad genuina esta directamente asociada con el amor, y no creo ser la única. Pero a lo que voy, es que yo dejaría todas esas cosas materiales que en cierto momento llenaron un vacío, o que simplemente adquirí por que sentía que las necesitaba para ser feliz, por amor. Dejaría todos esos objetos por amor verdadero, por el amor que siento en este momento de mi vida, y por el amor que irá evolucionando a lo largo de ella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario